Están por todas partes. Llevas años escuchando hablar de ellos. Sabes que los hay por todas partes, de todos los estilos y en cualquier formato. Sí, estamos hablando de los festivales. Esa oda al verano, la amistad y la música que año tras año hace moverse a cientos de miles de personas –si no son millones-, haciendo incluso que sus vacaciones dependan de ellos. Aunque es cierto que los hay desde hace décadas, es en los últimos años cuando el boom se ha hecho realidad, no solo aumentando el número de estos, sino también su tamaño.
Lo cierto es que España es un país idílico para la celebración de eventos así, especialmente entre mayo y septiembre. Situados en el sur de Europa y siendo uno de los países más turísticos, no es de extrañar.
Seamos sinceros, pasar el verano entre verbenas de pueblos y festivales de música es el sueño de cualquiera. Ahora bien, aunque la amplia mayoría no pueda permitírselo, uno sí puede ahorrar cada año para ir al menos a uno. Si tú aún no te has decidido, aquí te damos unos consejos que harán disfrutar mucho más la experiencia.
Elige bien a cuál ir
Por oferta no será. Primero revisa carteles y ve cuál lleva artistas o bandas que te gusten más o te apetezca más ver en directo. Recuerda: esto trata principalmente de música.
¿No te decides?
Está claro, cuando tienes dinero pero solo lo puedes gastar en una cosa cuesta decidirse. Por ello, además del cartel es importante tener en cuenta el entorno, tamaño, el viaje, alojamiento, etc. No es lo mismo ir a un festival masificado que a uno en plena naturaleza en un pueblo de 50 habitantes y mucho más barato.
Convence a tus amigos
Nadie dice que ir solo esté mal, pero todo lo que se comparta con amigos siempre será mejor. Es un hecho.
Busca bien dónde y cómo dormir
Muchos de los festivales tienen su propio camping, unos gratuitos y otros de pago. Si tu idea es dormir en uno, prepara lo más importante: el saco. Luego ya, depende del nivel de cada uno se pueden ir añadiendo extras, como a la pizza: almohada, almohada hinchable, antifaz, tapones… Pero lo principal es el saco, que en determinados lugares y a determinadas horas se olvida un poco lo del clima mediterráneo.
La ropa es más importante de lo que parece
Hoy en día es muy fácil controlar el tiempo que hará en un lugar durante determinados días antes de que lleguen, por eso es clave ir preparado. Como normalmente irás de festival en verano, está claro la ropa que llevarás, pero una sudadera o pantalón largo seguro que no viene mal. También es clave un buen calzado, ya que pasarás horas andando, corriendo, saltando y bailando. Tus pies, piernas y espalda lo agradecerán. Y, aunque ya son algo normal incluso fuera de la temporada festivalera, nunca está de más recordarlo: una riñonera.
Lleva un disfraz. O varios
Esto no es un consejo, simplemente una obligación.

Cuídate
Estar tres o cuatro días seguidos comiendo y bebiendo en un festival puede pasar factura a más de un estómago. Nunca viene mal echar algún protector estomacal al bolsillo, protector solar, etc.
Haz un planning de conciertos
Si vas a un festival de tamaño medio o superior es probable que tenga más de un escenario y puedan solaparse actuaciones. Lo mejor es ir con una los horarios en el móvil o en una hoja impresa y decidir antes de cada jornada a cuál ir.
Aprovecha para conocer nuevos artistas
Muchas veces la gente va a comer o beber algo cuando no ve dos conciertos que les gusta. Nuestro consejo es que, antes de ir, busques bandas, cantantes o DJs que formen parte del cartel y no conozcas y, si te llaman la atención, aproveches para disfrutar de su directo. Si tocan al principio de la jornada, muchas veces es habitual ver poca gente en el público, y es el momento idóneo para descubrir nuevos talentos. Quién sabe si acabarán triunfando y en unos años podrás fardar de haberlos visto cuando no eran famosos.
Cuidado con las pertenencias
Los robos o pérdidas son unos clásicos de los festivales. Normal, teniendo en cuenta la cantidad de gente que se acumula en apenas unos días, por lo que es importante guardar bien la cartera, el móvil, etc., tanto si lo llevas encima como si lo dejas en la tienda de campaña antes de ir a los conciertos. También es importante guardar los documentos por si toca ir a comisaría a denunciar un caso de hurto.
Despreocúpate y disfruta
Sin duda, lo más importante. Sean cuales sean tus razones para ir a un festival, lo mejor es ir con buena actitud, dispuesto a pasarlo en grande y, por qué no, conocer gente.
Deja una respuesta
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.